El influyente banco de inversión Goldman Sachs acaba de actualizar sus previsiones con respecto al precio del oro elevando hasta los US$ 1,450 dólares la onza en los próximos 12 meses, este informe estuvo a cargo de los analistas Michael Hinds y Jeffrey Currie.
Al momento de realizar este informe el oro sube un 0.51% hasta los US$ 1,220 dólares la onza mientras que la plata sube un 1.37% hasta los US$ 16.37 dólares.
El informe de Goldman Sachs ha elevado la previsión del oro a tres meses desde los US$ 1,225 a los US$ US$ 1,350 dólares la onza troy, la previsión a seis meses desde los US$ 1,200 a los US$ 1,375 dólares, y la de doce meses desde US$ 1,225 hasta los US$ 1,450 dolares la onza.
Los analistas señalaron que esta revisión de las previsiones obedece al fuerte crecimiento del mercados emergentes, ello ha permitido que el metal precioso resistiera los crecientes rendimiento de los bonos.
Este crecimiento de los mercados emergentes ha permitido de un revalorización de sus divisas frente al dólar americano, no olvidar que un dólar débil hace más atractivo a los metales preciosos.
Otro factor que impulsaría el alza del oro es el crecimiento de la tasa de inflación implícita apoyada por la subida del petróleo, ello permitirá una mayor expansión del mercado del oro.
Los analistas apuntan a una fuerte demanda de joyas de 650 toneladas para el cuarto trimestre de 2017, que según explican, es el mayor componente de la demanda antes de la inversión y los ETF de oro, además señalan que el crecimiento en los mercados emergentes tiene una tendencia superior al 6%, lo que significa que la riqueza de los hogares aumentará dejando a los consumidores más dinero para comprar oro.
El oro a caído cerca de 3% en las dos ultimas semanas luego de alcanzar un máximo de US$ 1,360 dólares la onza, esto debido al fortalecimiento del dólar americano apoyada por la aprobación de la ley presupuestaria que puso fin al cierre de gobierno en los Estados Unidos.
Desde el punto de vista técnico el oro cotiza en una tendencia alcista de largo plazo, sin embargo no se descarta un descenso hasta su nivel de soporte clave sobre los US$ 1,300 dólares la onza, los inversores deberán prestar mucha atención a la evolución de dólar y a los informes económicos en los Estados Unidos.
Al momento de realizar este informe el oro sube un 0.51% hasta los US$ 1,220 dólares la onza mientras que la plata sube un 1.37% hasta los US$ 16.37 dólares.
El informe de Goldman Sachs ha elevado la previsión del oro a tres meses desde los US$ 1,225 a los US$ US$ 1,350 dólares la onza troy, la previsión a seis meses desde los US$ 1,200 a los US$ 1,375 dólares, y la de doce meses desde US$ 1,225 hasta los US$ 1,450 dolares la onza.
Los analistas señalaron que esta revisión de las previsiones obedece al fuerte crecimiento del mercados emergentes, ello ha permitido que el metal precioso resistiera los crecientes rendimiento de los bonos.
Este crecimiento de los mercados emergentes ha permitido de un revalorización de sus divisas frente al dólar americano, no olvidar que un dólar débil hace más atractivo a los metales preciosos.
Otro factor que impulsaría el alza del oro es el crecimiento de la tasa de inflación implícita apoyada por la subida del petróleo, ello permitirá una mayor expansión del mercado del oro.
Los analistas apuntan a una fuerte demanda de joyas de 650 toneladas para el cuarto trimestre de 2017, que según explican, es el mayor componente de la demanda antes de la inversión y los ETF de oro, además señalan que el crecimiento en los mercados emergentes tiene una tendencia superior al 6%, lo que significa que la riqueza de los hogares aumentará dejando a los consumidores más dinero para comprar oro.
El oro a caído cerca de 3% en las dos ultimas semanas luego de alcanzar un máximo de US$ 1,360 dólares la onza, esto debido al fortalecimiento del dólar americano apoyada por la aprobación de la ley presupuestaria que puso fin al cierre de gobierno en los Estados Unidos.
Desde el punto de vista técnico el oro cotiza en una tendencia alcista de largo plazo, sin embargo no se descarta un descenso hasta su nivel de soporte clave sobre los US$ 1,300 dólares la onza, los inversores deberán prestar mucha atención a la evolución de dólar y a los informes económicos en los Estados Unidos.
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